Kylian Mbappé (22 años) ha tomado la decisión de abandonar el PSG. Su contrato finaliza en 2022 y ya le ha comunicado a la directiva parisina que no va a renovar, por lo que este verano o el que viene, ya como jugador libre, cambiará de aires. Él, tal y como se ha informado desde Francia, no tiene ningún problema en quedarse en la capital francesa esta temporada y cumplir su vínculo. El problema es que los parisinos, si quieren sacar algún rédito económico por su venta, deberán dejarlo marchar antes del próximo 31 de agosto.
Nada parece alterar la determinación del delantero, que ha rechazado en numerosas ocasiones las ofertas que Nasser Al Khelaifi, presidente de la entidad, y Leonardo, director deportivo, le han puesto sobre la mesa. Le han ofrecido un sueldo millonario y un proyecto con el que luchar por la ansiada Champions League. Los fichajes de Wijnaldum, Achraf o Ramos tienen ese objetivo. Pero ni siquiera la llegada de estos cracks o el dinero prometido han hecho cambiar de idea a Mbappé.
A pesar de los continuos rechazos por parte de Kylian y su entorno, en el PSG no pierden la confianza y creen que todavía es posible retener a su estrella. Mandatarios del conjunto francés siguen transmitiendo que están convencidos de que que el atacante acabará renovando este mismo verano, alargando su vínculo al club hasta, como mínimo, después del Mundial de Qatar que arranca en noviembre de 2022.
Sus mensajes son contrarios a los que se filtran desde el lado del entorno de Mbappé, en la que tienen claro que su etapa en París ha llegado a su fin. Eso sí, en ningún momento piensan entrar en conflicto con el PSG, equipo que consideran su casa y al que le agradecen su confianza desde que su fichaje en 2017.
El Madrid se mantiene al margen, paciente, esperando su momento. Sus posibilidades de fichar a Mbappé este mercado pasan por que los parisinos abran la mano, algo creen que acabará sucediendo. En ese caso, el conjunto blanco es el mejor colocado por la intención del jugador de vestir de blanco y la buena relación de Florentino Pérez con los dueños del PSG. Pase lo que pase, todo apunta a que se resolverá en los últimos días de mercado.