El Sevilla suma diez jornadas sin perder, las seis tras el confinamiento, y cuatro antes del mismo. No cae desde que el Celta le remontase en Vigo. Desde entonces, cuatro victorias (Getafe, Osasuna, Betis y Leganés) y seis empates (Espanyol, Levante, Atlético, Villarreal, Barcelona y Valladolid). Una racha que iguala la mejor de Unai Emery en la 14-15, en el año en el que el club sevillista hizo su récord de puntos en la categoría: 76. Aquel Sevilla sumó siete victorias y tres empates. Le cortó la racha el Real Madrid (2-3), terminando LaLiga con dos victorias y un empate. Es decir, en los últimos 14 partidos sumó: 9V, 4E y 1D.
Y con este dato, que demuestra que el Sevilla es de los equipos más difíciles de doblegar del fútbol español. Lleva seis derrotas en todo el curso en Liga tras 33 jornadas. Cuatro de ellas llegaron lejos del Sánchez-Pizjuán, justo su mayor caladero de puntos (29). Es el segundo mejor visitante de Primera y ha conseguido incluso más victorias (8) que en Nervión (7). Y más goles (26-22). Aún le quedan dos salidas, complicadas, ante Athletic y Real Sociedad.
En Nervión, donde suma dos puntos menos (con un partido también menos), le queda por recibir a Eibar, Mallorca y Valencia. Lopetegui ha construido un equipo que compite como una roca. Sólo su falta de acierto ante la portería rival ha dejado un final de Liga abierto y sin la Champions en su bolsillo. Le quedan cinco finales. Si sigue sin perder, difícilmente se le podrá escapar el gran premio final.